La suerte está echada

Bueno fueron algo así como 7 millones de votos, un 62% del total y por tanto una victoria inapelable. Muy a mi pesar, Uribe fue reelegido.
Ahora que recibió un mandato y una legitimidad contundente, solo espero -vanamente, seguro- que no la aproveche para salir en un año con que necesita cambiar otro 'artículito' y entonces prolongar esta pesadilla al infinito.
Espero que esta vez Uribe sí cumpla con su palabra y por fin deje de hacer campaña y se dedique a gobernar. Cosa que estos cuatro años porvenir si le alcancen para completar lo que sea que quiera hacer con esta desdichada nación.
A sus electores no queda sino pedirles que le bajen a la soberbia y que le jalen de vez en cuando a la reflexión crítica, pero dado el estado de enamoramiento se que es mucho pedir.
Ahora que la suerte de este país está definitivamente ligada a la del caudillo espero que los años que nos quedan bajo su mandato no sean tan nefastos como me temo.
Aquí criticaré cuando lo necesite para no atragantarme y mantener el equilibrio mental. Pero por ahora no queda sino mascullar la derrota y resignarse.